Nueva vuelta al sol
Inspirador, circular, integrador. Bienvenidos los nuevos ciclos de renacimiento.
"El año es un círculo; el invierno se convierte en primavera; de ésta surge el verano y, finalmente, llega el otoño para completar el año.
El círculo del tiempo no se interrumpe jamás. Su ritmo se refleja en el día, que también es circular. Primero surge el amanecer, que nace de la oscuridad , y crece hasta el mediodía; después decrece hasta el atardecer hasta que se convierte en noche. El ser humano vive en el tiempo , por tanto, su vida también es circular. Venimos de lo desconocido, aparecemos sobre la tierra, vivimos en ella, nos nutrimos de ella, y, cuando llega el momento, regresamos a lo desconocido. El mar también sigue ese ritmo; la marea fluye y refluye.
Existen cuatro estaciones en el corazón de arcilla. En invierno, los colores se desvanecen en el mundo de la naturaleza; todo es gris, negro o blanco. Los paisajes y los bellos colores palidecen. La hierba desaparece y hasta la tierra se congela en un estado de desolado retraimiento. En invierno, la naturaleza se retira. El árbol pierde sus hojas y se dirige hacia su interior. En el invierno de la vida , sufrimos dolores, dificultades o problemas. Lo más prudente es imitar el instinto de la naturaleza y retirarse hacia el interior. Cuando en el alma es invierno ,no conviene iniciar nuevos proyectos. Es mejor ocultarse y refugiarse. Este es el remedio de la naturaleza, que se ocupa de sí misma hibernando…
Uno de los tránsitos más hermosos en la naturaleza es el que ocurre entre el invierno y la primavera. Un antiguo místico zen dijo: “Cuando se abre una flor es primavera en todas partes”
Los maravillosos colores y la vida nueva que recibe la tierra hacen de la primavera un tiempo de gran exuberancia y esperanza. En cierto sentido, la primavera es la estación más joven y el invierno la más vieja. El invierno estaba aquí desde el principio. Reinó durante miles de años sobre una naturaleza silente e inhóspita hasta que nació la vegetación. La primavera es una estación joven, llega con un torrente de vida y esperanza. En su corazón habita un gran anhelo interior. Es una estación en la que el deseo y la memoria se agitan y se buscan.
Y la primavera continúa su apogeo y continúa hasta el verano. El verano es una época de luz, crecimiento y llegada. Un@ siente que la vida secreta del año se oculta en invierno, se asoma en primavera y termina de florecer en verano. "
Imatge Pixabay
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